Iñaki Bea y Luis Prieto, dos vascos en Pucela

Redacción Valladolid /JPHoy entrevistamos a Iñaki Bea y a Luis Prieto. Ambos son jugadores de fútbol del Real Valladolid Club de Fútbol y ambos son vascos. Viven con completa normalidad el disfrute que produce poder utilizar tu lengua materna o tu lengua aprendida.

Iñaki Bea y Luis Prieto /JP

Iñaki Bea y Luis Prieto /JP

Lo más gracioso de la entrevista es que en alguna ocasión, el euskera les sirve para comunicarse en el terreno de juego y que no les entiendan los rivales. Recordamos que el entrenador, Mendilibar, también es vasco: un trío que ha ganado alguna mano y está rozando la salvación en la primera división de la Liga Española.

Iñaki Bea Jaúregui                         Luis Prieto Zalbidegoitia

Iñaki Bea: Ficha

Iñaki Bea. Jugador vasco del Real Valladolid C.F. /JP

Luis Prieto: Ficha

Luis Prieto. Jugador vasco del Real Valladolid C.F. /JP

Entrevistador: Hola, buenos días. Es posible que os extrañe un poco que os hagan una entrevista y no tenga nada que ver con la actualidad más candente del fútbol. Lo que le interesa a la gente que visita este sitio es la lengua viva y cómo la utilizamos en diferentes situaciones o contextos. Ni que decir tiene que vuestra repercusión mediática es notable y vuestra situación lingüística, como vascos, en Valladolid, no es pingüe en intereses. La primera pregunta es obligada: ¿Habláis euskera como lengua materna o por haberlo aprendido en la escuela?

Ficha técnica de Luis PrietoLuis Prieto: Sí, en mi caso, en casa hablo tanto en castellano como en euskera. Hablo con gran parte de la familia en euskera y lo he aprendido de mi madre quien también lo habla. Pero no hay problema en utilizar en ocasiones el castellano depende del momento. Podemos utilizar ambos idiomas.

Ficha técnica de Iñaki BeaIñaki Bea: Yo soy alavés, de la zona de Amurrio, y se habla menos el euskera. Así pues, es algo más complicado haberlo podido aprender en la familia; sin embargo, lo conozco perfectamente y lo aprendí en la escuela, en una ikastola, y lo hablo. En casa no es la lengua que podríamos llamar familiar a excepción de cuando trato con mi sobrina pequeña. Yo soy un euskaldumberri, que es un hablante de euskera que lo ha aprendido en la escuela o con una edad avanzada y no como lengua materna, adquirida desde la niñez. Y lo habla, claro está.

Entrevistador: ¿Entre vosotros dos, en qué lengua habláis?

Luis Prieto: Entre nosotros dos podemos hablar perfectamente euskera y castellano. Es posible, incluso, que al estar entrenando los dos nos pongamos a hablar en euskera o, indistintamente, hablamos en castellano.

Iñaki Bea: Sí, podemos cambiar de registro según la conversación y el momento. Lo que ocurre es que cuando estamos con más gente alrededor hablamos en castellano. Sea en el terreno de juego o con los compañeros o como si fuésemos a comprar a la pescadería o en cualquier lugar público. No hablamos entre nosotros en euskera, aunque hablemos de nuestras cosas, por respeto a los demás. Por otro lado, podemos estar solos dentro del coche y hablamos en euskera. Si estamos en un bar, por poner otro ejemplo, no nos ponemos a hablar en euskera porque podría parecerle al camarero o a quien fuera que es una falta de respeto, y puede sentar mal. Y como no nos incomoda hablar uno u otro idioma…

Luis Prieto: O cuando vamos con otros compañeros en el coche y ya no estamos solos, pues también nos ponemos a hablar en castellano todos sin problema. Es cuando vamos solos que mayoritariamente hablamos en euskera.

Algo de Charla en los campos anexos /JP

Algo de charla en los campos anexos /JP

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Entrevistador: ¿Y con el entrenador?

Iñaki: En castellano.

Luis: Aquí en el vestuario hablamos en castellano con él porque también él se dirige a todos en castellano. Aun cuando habla sólo con nosotros, por el motivo de que habla a un grupo, nos habla en castellano. En el caso de que estuviésemos en un momento solos los dos, sin nadie más que pudiese interpretar una indicación o una consigna, sí puede ser que hablemos euskera, pero como podemos hacerlo en castellano.

Iñaki: Conmigo el Mister se dirige en castellano porque mi euskera, aunque lo haya aprendido desde pequeño, no es tan fluido como el suyo [referido a Luis]. Es un idioma muy difícil; en Álava se habla mucho menos que en Vizcaya. En mi pueblo no lo habla mucha gente y en los comercios o para comparar el pan casi siempre te diriges en castellano. Ahora la gente joven sí utiliza bastante más el euskera, además de que la gente que lo sabe también mayoritariamente viene de poblaciones pequeñas cercanas como Ondarroa o como el pueblo de Luis donde se habla mucho el euskera. De ahí que el Míster, incluso en privado en su despacho, se dirige a mí en castellano.

Trabajo y comunicación en equipo /JP

Trabajo y comunicación en equipo /JP

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Entrevistador: ¿Os han llamado la atención en alguna ocasión para que cambiéis de lengua y habléis en castellano?

Luis Prieto: No, nunca. Como en situaciones de más gente ya hablamos en castellano, y son contadas las ocasiones que, aún en euskera, hablamos entre nosotros, no hay problema alguno.

Iñaki: Bueno, sólo de cachondeo los compañeros. Puede ser que estemos hablando en euskera cuando vamos hablando entre nosotros en privado durante un viaje y se oye que hablamos en vasco pero es siempre en broma. Nos dicen “dejad de hablar ese idioma que no se entiende”, pero todo en broma, porque sólo lo hablamos entre nosotros cuando nadie más media en la conversación. Pero siempre son bromas como se las podrían hacer a un par de murcianos que hablan seseando o con su acento o dialecto de la zona. Todo queda en bromas.

Luis: Si se diese el caso de que nos ponemos a hablar en un grupo en euskera y hay compañeros que no lo hablan ni entienden, es normal que alguien pudiese molestarse porque es una falta de respeto. Incluso aunque yo me dirigiese a Iñaki en una conversación privada, entre él y yo, pero estamos en un grupo, es molesto. En cambio, si estamos apartados, hablando solos los dos de nuestras cosas, no entiendo por qué tendría que decirnos nadie, nadie que no está en nuestra conversación ni que vaya con nosotros, en qué idioma tenemos que hablar si somos capaces de hablar los dos entre nosotros.

Entrevistador: ¿Qué opináis, si la conversación es únicamente vuestra al margen de un taxista, y vais en taxi?…

Iñaki: No hablaríamos en euskera, seguro. Es que si hay alguien presente que aunque no hable con nosotros ni nosotros directamente con él, lo que no hacemos es comunicarnos en euskera porque es una falta de respeto a los presentes y a los compañeros. Si, por ejemplo, estoy hablando con Luis, en nuestra conversación privada de la que no participa nadie más en el vestuario, pero yo estoy a un lado y él en la otra punta: yo a él no me dirijo en euskera nunca. Puede haber terceras personas que se sientan molestas y me parece una falta de respeto. Podemos ir en un autobús y hablamos nosotros en euskera, y no pasa nada porque los de alrededor ni están en la conversación y no les importa, pero cuando por contexto, lo del taxista, sí están incluidas terceras personas… no hablamos en euskera.

Entrevistador: ¿En otros campos de fútbol, habláis en euskera con otros jugadores vascos como , por ejemplo, con Joseba Llorente del Villarreal y que antes jugó con vosotros en el Real Valladolid?

Iñaki: Pues mira, depende; el otro día con lo del penalti me puse a hablar con él en euskera. Pero claro, en un lance en el que después nos quedamos solos hablando. Sin embargo, si está el árbitro cerca y presta atención, aunque no hable con él y quisiera que no se enterase, no se me ocurre otra cosa que hablar en castellano.

Estadio del Real Valladolid C.F. /JP

Estadio del Real Valladolid C.F. /JP

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Por ejemplo, otro caso opuesto sería en un campo contrario. Yo sí que puedo hablar en euskera en el terreno de juego si le quiero decir a Luis alguna señal; pues se la digo en euskera, porque estoy jugando con el hecho de que yo sé un idioma que el delantero no sabe y me aprovecho de la circunstancia.

Como en el caso de un córner, si yo estoy en una posición y Luis en otra y queremos cambiar las posiciones en el saque, en lugar de decirlo en castellano, se lo digo a él en esukera para que lo sepa sólo él. O cuando hacemos un bloqueo.

Luis: Sí, es cierto, cuando estamos en un córner lo hacemos en esukera para aprovechar la ventaja.

Iñaki: Pero eso no quita que en medio de la jugada si la indicación que nos hacemos va a influir negativamente en alguien como Álvaro Rubio, por ejemplo, no se nos ocurre darnos la señal en euskera.

Entrevistador: Cuando jugáis con el Athlétic de Bilbao, ¿habláis en euskera?

Luis: No creas, no se habla mucho porque el sesenta o setenta por ciento de los jugadores no habla vasco. De veinticuatro jugadores puede que lo hablen diez. Entre ellos les pasará lo mismo que a nosotros. Si se dan instrucciones en el terreno para que el contrario no las entienda… Y si hay alguien de su equipo que no lo habla, pues no se van a perjudicar. Es como si hablan dos ingleses entre ellos, y se dan las consignas. Pero si hay alguien al lado que pueda sentirse molesto y pueden cambiar al castellano…

Entrevistador: Cuando oís hablar en catalán o gallego en los terrenos de juego, ¿os veis reflejados en lo que os sucede con la lengua?

Iñaki: Pues no sé cuántos hablaran catalán del Barça, pero me imagino que les ocurre lo mismo que a nosotros. Los idiomas no son ningún problema sino una virtud. En el caso de que fuese en el autobús con Puyol y Piquer y están hablando entre ellos sentados juntos sin que medie una ámbito mayor que el privado en su conversación y aunque yo los oiga y entienda casualmente que hablan en catalán, a mí no me molesta. Lo mismo que si van Goitom y Hariz hablando entre ellos. Lo que puede ser molesto es que tengan conversaciones cruzadas aunque están hablando de lo suyo por más privado que sea. Aunque estén hablando de lo que van a cocinar para comer. Luis y yo no lo hacemos por respeto a los demás, aunque hablemos de una punta a la otra de lo que vamos a comprar para comer. Sería una falta de respeto hacia Víctor, Óscar, Borja, Obeche, Álvaro Rubio que, aunque no están en la conversación de nuestra comida, están ahí sentados. Otra cosa es que te cruces en la sala del médico o que vaya con Luis por el pasillo de los vestuarios y le comento algo en euskera.

Entrevistador: Por lo que habéis estado diciendo, no tenéis problemas para intercambiar códigos lingüísticos.

Iñaki: No, qué va. La gente que dice que tiene más fluido el euskera que el castellano o el catalán que el castellano… para justificar que lo hablan donde sea y como sea, creo que no es educado. Yo creo que soy capaz de cambiar el chip con bien poco esfuerzo.

Luis: No, nosotros no tenemos problema alguno. Podemos, perfectamente, empezar una conversación en euskera y terminarla en castellano. O hacerlo al revés, no me supone ningún inconveniente pasar de una lengua a otra.

Iñaki: En mi caso, tengo más fluido el castellano que el euskera, no como Luis que habla euskera de toda la vida y en muchos más contextos que yo. De todos modos, estoy seguro que hago un examen oficial del Gobierno Vasco y obtengo mejor nota que él. Esto ocurre porque yo aprendí y me eduqué en euskera batúa que es el vasco más normalizado, el planificado, algo más fácil de entender que el euskera de los pueblos.

Luis: En la zona de mi pueblo se habla la variante del vizcaíno; mi pueblo está a escasos veinte minutos de Bilbao. Y, por otro lado, aunque sea una zona más o menos homogénea, las diferencias entre valles también son muchas, o entre pueblos. Dima se encuentra a media hora de Durango, donde también tengo familia, y cuando los oigo hablar me doy cuenta de que hay muchas palabras y expresiones que no consigo entender fácilmente. Ellos hablan con variantes y léxico muy específico del euskera de su pueblo que se puede hacer extraño en el pueblo de al lado.

Iñaki: Como entre Ondarro y Mutricu. Son dos pueblos limítrofes entre las provincias de Álava y Vizcaya, separados por dos casas y hablan con muchas diferencias. El euskera es una lengua muy rica en variantes porque durante muchos años a estado prohibido y eso provocaba que sólo se hablase en casa o, en otros contextos, en la clandestinidad y la transmisión de la lengua se hiciera con muchas particularidades de las zonas, de las familias, de cada casa. Es un euskera que no se ha perdido y que tampoco ha podido homogeneizarse y llegar a una normalización lingüística como recientemente con el euskera batúa. Si estos contextos le sucede al castellano, posiblemente tendríamos muchas más variantes del castellano y diferencias que las que hay ahora.

Entrevistador: ¿La conciencia lingüística hasta donde abarca en el domino lingüístico del euskera?

Luis: Todos hablamos vasco. Yo hable con quien hable, sea de Guipúzcoa, de Pamplona o de donde sea, con la salvedad de las diferencias de cada zona, lo entiendo todo. Todos tenemos claro que hablamos euskera, nos entendemos y es la misma lengua se hable donde se hable. No hay pugnas lingüísticas entre diversas zonas como puede pasar entre Cataluña y Valencia.

Iñaki: El caso de Navarra puede haber zonas más sesgadas con el hecho vasco pero muchas otras con completa normalidad. Queda claro que todos hablamos vasco. Es como el euskera de Francia. Las provincias que hablan en euskera hablan euskera, aunque hay que decir que la pronunciación sí que es bastante distinta por las ‘r’ que hacen los hablantes. Se hace más difícil de entender porque el cambio que hacen no es del castellano al euskera como tú sino del francés, que tiene otras características fonéticas. Como si un francés habla en castellano te cuenta entender algo más que si un euskera te lo habla, y no deja de ser castellano.

Entrevistador: Y con las novias ¿cómo está el tema?, ¿qué lengua utilizáis?

Luis: Con mi novia principalmente hablo en euskera. Y hablamos en euskera en torno al noventa por ciento de las ocasiones. Lo primero que utilizamos casi con total seguridad es el euskera. La llamo por teléfono y seguro que hablamos en euskera porque más conversación privada que esa… Lo primero que me contesta es en euskera y yo sigo también en euskera. Entre los dos cambiamos mucho menos de registro aunque podemos hablar en ocasiones en castellano por lo que ya hemos hablado antes, sobre todo por educación y porque no nos supone problema alguno; sin embargo, estamos hablando entre nosotros en castellano, y no hay nadie más, y nos damos cuenta de que porqué seguimos hablando en castellano si ya lo hablamos bastante y en todos los contextos. Además, los dos sabemos euskera y con la fluidez que tenemos a mí me parece bonito…

Iñaki: En mi caso hablo en castellano. Yo intento hablar todo lo que puedo en euskera con Luis porque me gusta poder practicarlo, perfeccionar, porque me gusta. Pero mi novia es de Murcia y entre los dos hablamos en castellano.

Muchas gracias por dedicarnos estos momentos tan entretenidos y por la charla tan amena que nos habéis brindado, de veras que ha sido una charla muy agradecida. Os dejamos para que podáis ir a la pescadería ya que lo habéis mencionado más de una vez y no os entretenemos más en estos temas tan tangenciales a lo que es el fútbol, en este caso la lengua, aunque son temas tan vitales como la existencia misma. Ya hemos visto que la comunicación, sea donde sea, siempre es a través de un código, lingüístico o no, pero código compartido.

La lengua es el mecanismo más óptimo para comunicarnos y nunca debe suponer un obstáculo porque entonces estamos falseando la esencia de la comunicación. Y si alguien tiene curiosidad por saber cómo se traducen en euskera algunos de los términos más futboleros, pulsad aquí.

Redacción Valladolid /JPLa traducción es gentileza de los más indicados para ello: los propios jugadores que utilizan esa misma lengua para comunicarse, Iñaki y Luis.

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REDACCIÓN VALLADOLID

4 Responses to Iñaki Bea y Luis Prieto, dos vascos en Pucela

  1. Pinciano dice:

    Muy buena la entrevista. Veremos esta noche qué hace el Barcelona en Europa. Ánimo al Valladolid para seguir en primera.

    EL REAL VALLADOLID A LA UEFA

  2. Moro dice:

    He echado algo en falta y es la visión del que va a Euskadi a jugar. ¿Cómo se modifica su modo de hablar después de un tiempo jugando entre jugadores de la Real Sociedad? Por poner un ejemplo donde fichan jugadores que no son vascos.

  3. Juan dice:

    Ha sido gracioso el detalle de las palabras en vasco. Ya la había leído cuando ganó Lucia pero me salté ese detalle. Se hace curioso ver cómo es.

  4. Pinciano dice:

    Este fin de semana nos la jugamos. Quién nos lo iba a decir hace unos días. Hasta yo me creía salvado.

    NADA ES HASTA QUE SE CONCLUYE SU CREACIÓN PERFECTA

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